El impulso del triunfo del 2019 les dio la seguridad, para encarar y profundizar las políticas que comenzaron en los primeros cuatro años desde 2015. Ahora con la soberbia del triunfo y una oposición diezmada, la escribanía del HCD actualmente levanta la mano automáticamente para aprobar grandes reformas en tiempo récord -sin tratamiento adecuado- y sin la participación o publicidad con los actores o protagonistas de la comunidad. Incluso, algunas normas son cuestionadas de inconstitucionales, como las relacionadas a la nueva forma de recaudar y muchos artículos que delegan facultades en el Intendente de las nuevas ordenanzas fiscal e impositiva.

En la última sesión se trataron 3 temas importantes a mi entender, como son la rendición de cuentas, la nueva ordenanza fiscal e impositiva, y modificaciones al Código de Ordenamiento Urbano en un paquete de 36 reformas; las cuales voy a comentar brevemente a continuación:

La rendición de cuentas del año electoral de Campana genera cada vez más dudas; y la incertidumbre sobre la realidad de las cuentas crece. Esta incertidumbre se refleja en los 150 millones de pesos más que se gastaron sobre el total recaudado.

Es decir que se el 2019 el Intendente dejó un ROJO de deuda de 150 millones de pesos -cuando los ingresos fueron exorbitantes en 2019-, y si además, a eso le sumamos que los contribuyentes tienen deudas por 650 millones de pesos en tasas municipales, y agregamos que Campana tiene deudas con proveedores por muchos millones más; y también que tiene menos dinero en Caja de lo que había a fines de 2018 comparado con 2019; el Municipio está en un combo explosivo.

La incertidumbre aumenta porque ahora, en 2020, no están recibiendo dinero de la Provincia y Nación por la pandemia como antes, pero como gastaron demás por la campaña estimamos que las reservas son escasas.

Todas estas deducciones que hacemos de la impresión del balance municipal, quisimos cotejarlas en los papeles, pero ellos lo negaron sistemáticamente. El Municipio nos ocultó toda la información que pedimos; entonces nuestra duda crece más. El que no muestra es porque tiene algo que esconder.

NO HUBO FORMA DE CHEQUEAR LOS DOCUMENTOS.

También pedimos información sobre dos proveedores: Kavos es una empresa tiene denuncias penales por facturas truchas en Quilmes, donde también había municipio del PRO, y fue la que pavimentó todas las calles de La Josefa; por su parte, C&E que tiene mucho trabajo en Campana, tiene investigaciones periodísticas donde lo vinculan a los sobornos de Odebrecht en la obra pública. Esta es otra razón por la que no nos dan acceso a la documentación.

La ordenanza fiscal e impositiva la aprobaron sin ni siquiera dejarnos discutir. Brevemente, con estas nuevas normas de recaudación, aumenta excesivamente la presión fiscal en casi todas las tasas municipales. Aquellas tasas que no subieron los montos, se delegaron las facultades en la Agencia de Recaudación Municipal (ARM) para que pueda aumentarlo cuando quiera, a través de la determinación del hecho imponible o la modificación de las alícuotas de la Base Imponible directamente por el Intendente a través de la ARM.

En total hay cerca de 40 delegaciones expresas en la ARM de facultades propias del Departamento Deliberativo, es decir de los concejales. Sólo la Asamblea de Mayores Contribuyentes y el Concejo pueden aumentar tasas, y ahora eso será diferente. Desde el 2016 ya lo hizo el Intendente en la Tasa de Barrio y Limpieza y Seguridad e Higiene; ahora será en todas las tasas municipales (incluso las casi 10 nuevas tasas que se crearon). También se delegó la interpretación de la normas en la ARM, algo muy peligroso porque también le dio facultades de dictar normas generales y obligatorias; es decir la suma del poder público (poder judicial interpretando, poder legislativo dictando normas, y poder ejecutivo recaudando).

Por último, también se modificó el Código de Ordenamiento Urbano, algunas modificaciones han sido sólo actualizaciones de modificaciones ya aprobadas previamente; pero lo que nos llamó la atención, es que la ficha urbanística del Morejón donde -oportunamente- en diciembre de 2017 cuando se modificó se había solicitado expresamente y consta en el acta que la sesión que leí expresamente se requería la prohibición expresa de Planta de Tratamiento de Residuos Sólidos Urbanos; algo que obviamente no estaba incluido en la ficha urbanística que se trajo al HCD en esta modificación; y que esperemos no sea el inicio del CEAMSE en Campana. Nadie lo habla oficialmente, todos los niegan, pero los hechos día a día van dejando el camino allanado para instalar una planta de tratamientos de residuos en el Morejón.