Se nos fue Pepe Mujica. Nos deja un gran nombre: cabal, sincero, con convicciones firmes y utopías que hacían soñar con un mundo mejor.

Pepe nos visitó en Campana hace algunos años y compartió con nosotros momentos que quienes los vivimos no olvidaremos jamás. Recuerdo que llegó a la casa de Jorge y Stella con su paso cansino, buscando abrazar a quienes lo esperábamos con ansiedad. Compartió mates, anécdotas y una sonrisa que nos impactó a todos.

En esa ocasión, también visitó una plaza que ya había sido inaugurada anteriormente por su esposa, Lucía Topolansky. Durante la tarde, compartió charlas con residentes uruguayos de Campana y Zárate. Junto con autoridades municipales de ese entonces y una empresa local, se gestionó el nombre que hoy lleva esa plaza: República Oriental del Uruguay.

En el acto, que fue muy significativo, Pepe agradeció a las autoridades locales, por supuesto, pero también a los militantes que habían puesto el hombro para hacer realidad ese espacio. Saludó a las colectividades y dejó una frase que aún resuena:
"Hay que servir para cristalizar la esperanza."

Durante su discurso, también afirmó que los pueblos deben capitalizar el dolor más que la bonanza, y habló de la estatura moral de los gestores de la Patria Grande. Sobre la globalización, expresó:
"No se puede decir que ha traído más igualdad al mundo."
Y agregó que es necesario ampararse en intereses comunes para construir una gran nación.

Ya casi al atardecer, se fue de Campana dejando en todos nosotros ese sentimiento de hombre sencillo, provinciano, bonachón y profundamente comprensivo. Antes de marcharse, un grupo de jóvenes se le acercó para pedirle una reflexión final. Y él, fiel a su estilo, les respondió:

“A la edad de ustedes es natural que germinen utopías.
El desafío que van a empezar a tener es mantener el fuego sagrado cuando la piel se arruga y la vida te llena de responsabilidades.”

Todos los campanenses te recordamos con mucho afecto.

Hasta siempre, Pepe

El autor fue funcionario municipal durante las gestiones de Jorge Varela y Stella Maris Giroldi.