Campana Noticias
Noche de mucha lluvia, anegamientos, y el calor que no se va
La gran cantidad de agua precipitada ocasionó inconvenientes en distintos puntos de la Ciudad. También se produjeron cortes de energía, completando una noche “pasada por agua”.
Finalmente y después de varios días, llovió. Y lo hizo con todo, en gran caudal, generando inconvenientes en varios puntos de Campana.
En San Felipe, por ejemplo, la esquina de Laprida y Perito Moreno reflejó la intensidad del temporal, que complotó con algunos inconvenientes estructurales que, según los propios vecinos, los someten a este tipo de situaciones con cada lluvia fuerte.
“Los caños son chicos, o están tapados. Pero siempre nos pasa lo mismo” asegura una vecina, acostumbrada a sacar el agua desde el interior de su hogar, con cada lluvia que supera el promedio.
Desde Saavedra y Maipú, en el barrio Dallera, llega otro reclamo. Diferencias de altura entre calles, veredas, y los repavimentados, también llevan el agua hasta las puertas de las viviendas, ocasionando mucho malestar en los habitantes del sector.
Sin embargo, en otros sectores los anegamientos duraron poco, producto del efectivo escurrimiento. También, la actividad eléctrica ocasionó cortes en el servicio en algunos puntos de Campana, que se fueron normalizando poco a poco. Incluso, la Estación Meteorológica Automática de la UTN Facultad Regional Delta dejó de funcionar, por lo que no se sabe a ciencia cierta, que cantidad de agua cayó.
Los chaparrones fueron algo más que moderados. Esta vez, el viento no tuvo el protagonismo que en tormentas anteriores, y por fortuna, no cayó el tan temido granizo. Pero el mal tiempo podría continuar, por lo que hay que estar atentos.
En San Felipe, por ejemplo, la esquina de Laprida y Perito Moreno reflejó la intensidad del temporal, que complotó con algunos inconvenientes estructurales que, según los propios vecinos, los someten a este tipo de situaciones con cada lluvia fuerte.
“Los caños son chicos, o están tapados. Pero siempre nos pasa lo mismo” asegura una vecina, acostumbrada a sacar el agua desde el interior de su hogar, con cada lluvia que supera el promedio.
Desde Saavedra y Maipú, en el barrio Dallera, llega otro reclamo. Diferencias de altura entre calles, veredas, y los repavimentados, también llevan el agua hasta las puertas de las viviendas, ocasionando mucho malestar en los habitantes del sector.
Sin embargo, en otros sectores los anegamientos duraron poco, producto del efectivo escurrimiento. También, la actividad eléctrica ocasionó cortes en el servicio en algunos puntos de Campana, que se fueron normalizando poco a poco. Incluso, la Estación Meteorológica Automática de la UTN Facultad Regional Delta dejó de funcionar, por lo que no se sabe a ciencia cierta, que cantidad de agua cayó.
Los chaparrones fueron algo más que moderados. Esta vez, el viento no tuvo el protagonismo que en tormentas anteriores, y por fortuna, no cayó el tan temido granizo. Pero el mal tiempo podría continuar, por lo que hay que estar atentos.
