Siete accidentes en el mismo día y lugar
¿Cómo narrar aquello que resulta prácticamente imposible?. Pues haremos el intento…
Un hecho, o mejor dicho siete, tuvieron como escenario la Autovía 6. Y el tramo donde todo sucedió (al menos el 90% de los accidentes) fue el mismo, y coincide con el puente del Arroyo El Potrero.
Como siempre, esta zona es un verdadero “chocódromo” cuando llueve, debido a la acumulación de agua y la velocidad de los vehículos, siempre presente.
Todo comenzó anoche, cuando una camioneta Toyota SW4 voló al tomar el puente antes mencionado, rompió el guard raid y cayó en las aguas del arroyo. Sus dos ocupantes, sufrieron heridas de consideración.
Pero hoy todo empeoró. Temprano, pasadas las 8 de la mañana, una camioneta Renault Kangoo dominio HTM 808, perteneciente a la empresa Nobleza Piccardo, al parecer perdió el control tras patinar con el agua y el aceite derramado por el choque anterior, y por el hueco del guard raid roto (también por el anterior accidente) cayó al vacío, quedando a pocos metros del agua, y por ende, de la camioneta Totoya que se encontraba en el arroyo. Sus ocupantes, Fabio Ojeda de 29 años y oriundo de Merlo, junto a su acompañante, Carlos Teloso de 39 años y oriundo de Tortuguitas, se salvaron gracias al cinturón de seguridad, resultando ilesos.
Y allí, comenzó la seguidilla de accidentes. Pese a observar a dos vehículos que “yacían” en el Arroyo, nada hizo que la velocidad mermara y por ende, gracias a la copiosa lluvia que cayó durante todo el día, se fueron sucediendo uno detrás del otro.
Fue así que un Ford Escort patente AFG 222 despistó y chocó contra la barrera de seguridad, resultando su conductor con un fuerte golpe en la cabeza. También una camioneta Toyota Hilux gris, chapa GHG 700, embistió el guard raid montándose sobre su estructura. Sus ocupantes, ilesos.
Mientras el periodismo cubría los siniestros, ante la mirada atónita de fotógrafos y camarógrafos un Renault Megane perdió el control, voló por el aire y volcó, cayendo dentro de un zanjón, llenándose su interior de agua, mientras sus ocupantes salieron por sus propios medios. También un Fiat tipo, con dos personas a bordo, embistió la defensa rutera y terminó averiado a un costado.
Si bien la imprudencia ha sido una característica predominante en la violenta jornada, la fortuna también estuvo presente. Prácticamente no hubo heridos, solo lesiones menores y en algunos casos, personal de Bomberos ni siquiera debió trasladar a los involucrados.
El séptimo y último accidente ocurrió sobre la misma ruta, pero algunos metros antes, en cercanías de la Avenida Mitre. Se lo contamos, en algunos instantes…